El Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos ha presentado un amplio documento con más de 150 alegaciones al Anteproyecto de Ley de Medicamentos y Productos Sanitarios. Estas aportaciones son el resultado de un proceso consultivo en el que han participado los colegios farmacéuticos de todo el país, con el objetivo de salvaguardar la seguridad de los pacientes y asegurar un acceso equitativo a los tratamientos.
Una de las principales preocupaciones expresadas por el Consejo se centra en los artículos 97 y 99, donde se pide una redacción más precisa para asegurar que la elección del medicamento prescrito —una decisión esencialmente técnica— se lleve a cabo con la implicación de los profesionales cualificados, priorizando siempre la salud del paciente.
Asimismo, el Consejo General solicita eliminar el mecanismo de precios seleccionados contemplado en el artículo 116, advirtiendo que esta medida podría alterar el normal abastecimiento de medicamentos y generar desigualdades en el acceso. En su lugar, propone la apertura de un diálogo con el sector para explorar soluciones alternativas, como una revisión pormenorizada de los precios basada en criterios técnicos y económicos uniformes.
Entre las propuestas también se incluye el refuerzo del papel del farmacéutico en la atención sanitaria, valorando positivamente avances como la introducción de los medicamentos de primera prescripción médica en los artículos 2 y 19.3. Esta figura permitiría al farmacéutico intervenir de forma más activa en el seguimiento de los tratamientos, contribuyendo a aliviar la presión sobre la atención primaria sin menoscabar las funciones del prescriptor.
El anteproyecto se ve, además, como una ocasión estratégica para establecer un marco legal que respalde a nivel nacional los Servicios Profesionales Farmacéuticos Asistenciales (SPFA), que ya funcionan en varias comunidades autónomas y cuyo despliegue permitiría un acceso más justo y homogéneo a estos servicios.
Por último, las alegaciones incluyen iniciativas para facilitar el acceso a medicamentos de diagnóstico hospitalario y de uso ambulatorio a través de las farmacias comunitarias, y para preservar la separación entre las funciones de prescripción y dispensación de medicamentos, un principio clave en la legislación actual.
El Consejo General reafirma su voluntad de colaboración con el Ministerio de Sanidad y con el conjunto del sector farmacéutico, con el propósito de contribuir a una futura ley que armonice eficiencia y sostenibilidad con los valores fundamentales de seguridad, equidad y universalidad del sistema farmacéutico.