Los colegios farmacéuticos de algunas provincias están impulsando campañas para concienciar a la población de la importancia del uso adecuado de los fármacos y la necesidad de acompañarlos de receta cuando así se requiere
El Ibuprofeno 600 mg, por ley, debe dispensarse con una receta médica, sin embargo, la práctica es mucho más laxa y es muy habitual que los usuarios de farmacia soliciten estos medicamentos sin receta, por esta falta de rigurosidad, los colegios farmacéuticos de algunas provincias como Pontevedra, Valencia o Madrid están impulsando campañas para concienciar a la población de la importancia del uso adecuado de los fármacos y la necesidad de acompañarlos de receta cuando así se requiere.
Así como existen presentaciones con y sin receta de ibuprofeno 400 mg y paracetamol de 650 mg y de un gramo, no ocurre lo mismo con el Ibuprofeno 600 mg. El uso de esta última opción se reserva a patologías diagnosticadas por el médico, quien se encarga de realizar el seguimiento clínico, como se explica desde el Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos.
En general, los farmacéuticos recomiendan la dosis más baja y durante el menor tiempo posible, si los síntomas se prolongan, entonces conviene ir al médico, el farmacéutico siempre procura evitar posibles reacciones adversas».
El tratamiento a largo plazo con ibuprofeno a altas dosis aumenta el riesgo de problemas cardiovasculares, como los infartos o los ictus. De hecho, los expertos pedían a los profesionales sanitarios que, antes de iniciar un tratamiento prolongado con ibuprofeno 600 mg, se evaluasen los factores de riesgo cardiovascular del paciente. De ahí, la precaución con la automedicación en este sentido y la insistencia por parte de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria
Este es el motivo por el que, a día de hoy, en teoría, no está comercializada sin receta médica la alternativa de los 600 mg.